Joe Biden ganó el campo de batalla clave de Pensilvania el sábado, impulsándolo por encima del umbral de 270 votos del colegio electoral requerido para convertirse en presidente de los Estados Unidos.
Biden derrotó a Donald Trump luego de un conteo de votos muy reñido después de las elecciones del martes 3.
La campaña de Trump ha indicado que su candidato no planea ceder.
Biden dijo que era hora de que Estados Unidos «se una y sane».
«Con la campaña terminada, es hora de dejar atrás la ira y la retórica dura y unirnos como nación», dijo.
La participación récord frente a «obstáculos sin precedentes», dijo, mostró que la democracia «late profundamente en el corazón de Estados Unidos».
Su compañera de fórmula, Kamala Harris, se convertirá en la primera mujer vicepresidenta.
El resultado convierte a Trump en el primer presidente de un mandato desde la década de 1990.
La proyección de la victoria de Biden se basó en los resultados no oficiales de los estados que ya han terminado de contar sus votos y los resultados esperados de estados como Wisconsin, donde el recuento continúa.
Sus victorias proyectadas en Pensilvania y ahora también en Nevada lo llevan a 279 votos en el colegio electoral.
La elección ha tenido la participación más alta desde 1900. Biden ha ganado más de 74 millones de votos hasta ahora, la mayor cantidad para un candidato presidencial de Estados Unidos.
El presidente Trump se había declarado falsamente ganador de las elecciones cuando el recuento de votos estaba inconcluso. Desde entonces ha alegado irregularidades en el conteo, pero no ha presentado ninguna evidencia de fraude electoral.
Después de que se proyectó que Biden ganaría, se mantuvo desafiante, diciendo que Biden estaba «haciéndose pasar por el ganador falsamente» e insistiendo en que la elección estaba «lejos de terminar».
La campaña de Trump ha presentado una serie de demandas en varios estados.
Joe Biden se había postulado para la Casa Blanca dos veces antes, en 1988 y en 2008, pero se retiró y se unió a la lista de Barack Obama.
Sus ocho años como vicepresidente le permitieron reclamar gran parte del legado de Obama, incluida la aprobación de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio.
El senador de Delaware por seis mandatos fue elegido para el Congreso por primera vez en 1972.
Al principio de su carrera, se puso del lado de los segregacionistas del sur al oponerse al transporte escolar ordenado por la corte para integrar racialmente a las escuelas públicas.
También fue un feroz defensor de un proyecto de ley contra el crimen de 1994 que muchos en la izquierda ahora dicen que fomentaba largas condenas y encarcelamientos masivos.
La mayoría de los estadounidenses saben que la vida de Joe Biden ha estado marcada por una tragedia personal, experiencias a las que a menudo se refiere.
En 1972, perdió a su primera esposa, Neilia, y su hija pequeña, Naomi, en un accidente automovilístico. Sus hijos pequeños Beau y Hunter sobrevivieron al accidente.
En 2015, Beau murió de cáncer cerebral a la edad de 46 años, y Joe Biden dijo que esto jugó un papel en su decisión de no postularse para presidente en 2016.
La victoria de Biden fue impulsada por un fuerte apoyo de grupos que incluían mujeres, afroamericanos, votantes blancos con títulos universitarios y habitantes de la ciudad.
Venció a Trump por más de cuatro millones de votos en el recuento de votos populares a nivel nacional.
Biden, quien ha pasado medio siglo en la vida pública como senador de Estados Unidos y luego vicepresidente, heredará una nación en crisis por la pandemia y la desaceleración económica relacionada, así como las protestas contra el racismo y la brutalidad policial.
Donald Trump se convierte en el primer presidente de Estados Unidos en perder una candidatura a la reelección desde George H.W. Bush en 1992.
