La administración Trump dio a conocer detalles de una conversación telefónica en julio que desencadenó una investigación de juicio político contra el presidente de Estados Unidos.
Según las notas, Donald Trump le pidió al líder ucraniano que investigara las denuncias de corrupción que involucran al hijo del ex vice presidente demócrata Joe Biden.
Biden se perfila como el posible rival de Trump en las elecciones presidenciales del próximo año.
Las preocupaciones sobre la llamada fueron inicialmente planteadas por un denunciante.
Los demócratas acusaron a Trump de buscar ayuda extranjera para desprestigiar a un rival.
Según la constitución de los Estados Unidos, se puede acusar a un presidente por «traición, soborno u otros delitos y delitos menores», un procedimiento que puede llevar a su destitución.
En julio, Trump congeló la ayuda militar a Ucrania, pero insistió en que esto no se utilizó para presionar al nuevo gobierno en Kiev.
Trump discute con su homólogo ucraniano recién elegido, Volodymyr Zelensky, la destitución en 2016 de un fiscal, Viktor Shokin, según notas de su conversación telefónica del 25 de julio publicada por la Casa Blanca.
Se cita al presidente de los Estados Unidos diciendo en la llamada de media hora: «Escuché que tenía un fiscal que era muy bueno y que fue despedido y eso es realmente injusto».
Zelensky dice en respuesta: «Nos encargaremos de eso y trabajaremos en la investigación del caso».
Agradeciendo a Trump, Zelensky dice que se quedó en la Torre Trump en la ciudad de Nueva York durante una visita previa a los Estados Unidos.
En la llamada, el presidente Trump también le pide a Zelensky que trabaje con el Fiscal General de los Estados Unidos William Barr y el abogado personal de Trump, Rudolph Giuliani, para investigar el asunto, según las notas.
El Departamento de Justicia dijo el miércoles que Trump no había hablado con el fiscal general sobre que Ucrania investigara a Biden, y que Barr no se había comunicado con Ucrania.
Trump y sus aliados conservadores se han centrado en cómo Biden, como vicepresidente de Estados Unidos en 2016, presionó a Ucrania para que despidiera a Shokin.
La oficina de Shokin había abierto una investigación sobre Burisma, una compañía de gas natural en la que el hijo de Biden, Hunter Biden, era miembro de la junta.
Otros funcionarios occidentales habían pedido que se despidiera a Shokin debido a la percepción de que era blando con la corrupción.
Biden dijo el año pasado en un evento de política exterior cómo amenazó con retener $ 1 mil millones en ayuda a Ucrania a menos que Shokin fuera removido.
Ninguna evidencia ha salido a la luz hasta ahora de las malas acciones de los Bidens.
