Decenas de miles de personas se reunieron en Houston, Texas, el domingo para escuchar al primer ministro indio, Narendra Modi, y al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, en un mitin denominado «Howdy Modi».
El mitin, organizado por el Foro Indio de Texas, incluyó presentaciones culturales antes de que Modi y Trump subieran al escenario en el NRG Stadium.
En Estados Unidos viven unos 4 millones de indios americanos. Alrededor de 500,000 personas en Texas se identifican como indios americanos, incluidas unas 150,000 en Houston.
La Casa Blanca calificó el evento como «una gran oportunidad para enfatizar los fuertes lazos entre los dos países» y «reafirmar la asociación estratégica entre las democracias más grandes y antiguas del mundo».
La visita de Modi a Houston se produce antes de la Asamblea General de las Naciones Unidas de esta semana en Nueva York y en un momento particularmente tenso en el subcontinente.
El líder indio tensó aún más las relaciones a largo plazo con Pakistán el mes pasado al revocar la autonomía parcial de que goza la mayoría musulmana de Cachemira, que reclaman ambos países.
Pakistán ha condenado la represión y su primer ministro, Imran Khan, advirtió que conduciría al extremismo a más musulmanes del mundo.
Los miembros de la minoría religiosa india, grupos sij y musulmanes, planificaron manifestaciones cerca del estadio para protestar por la política de Modi en Cachemira.
Las conversaciones comerciales y la Asamblea General de la ONU están en la agenda de Modi durante su visita de una semana a los Estados Unidos.
