El comité de la Cámara que investigó el ataque del 6 de enero de 2021 al Capitolio de los Estados Unidos celebró su primera audiencia pública la noche del jueves en Washington.
Después de casi un año de investigación, el comité selecto de la Cámara de Representantes liderado por los demócratas mostró clips de entrevistas que realizó con miembros del círculo íntimo de Trump para respaldar sus hallazgos.
Solo dos republicanos, los representantes incondicionalmente anti-Trump Adam Kinzinger y Liz Cheney, participarán de las audiencias.
El expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, orquestó los disturbios en el Capitolio el año pasado en un «intento de golpe», según la investigación del Congreso.
Los partidarios de Trump irrumpieron en el Congreso el 6 de enero de 2021 cuando los legisladores se reunieron para certificar la victoria electoral de Joe Biden.
Se transmitieron imágenes del testimonio del ex fiscal general de los Estados Unidos, Bill Barr, que dijo que le había dicho repetidamente al ex presidente que había perdido las elecciones y que sus afirmaciones de fraude eran incorrectas.
“No podemos vivir en un mundo en el que la administración actual se mantenga en el poder basándose en su opinión, sin el respaldo de pruebas específicas, de que hubo fraude en las elecciones”, dijo el exfiscal general.
La audiencia también contó con una grabación del testimonio de Ivanka Trump, la hija del expresidente, que dijo que «aceptaba» el rechazo de Barr a la teoría de la conspiración de su padre.
Y hubo conmoción en la sala del comité cuando Cheney leyó un relato que afirmaba que Trump, cuando se le dijo que los manifestantes pedían a gritos que el vicepresidente Mike Pence fuera ahorcado por negarse a bloquear los resultados de las elecciones, sugirió que «se lo merece».
Cheney, vicepresidenta del comité y congresista de Wyoming, dijo: «Aquellos que invadieron nuestro Capitolio y lucharon contra las fuerzas del orden público durante horas estaban motivados por lo que el presidente Trump les había dicho: que las elecciones fueron robadas y que él era el legítimo presidente.
“El presidente Trump convocó a sus seguidores, reunió a los manifestantes y encendió la llama de este ataque”.
En ningún momento pidió a los servicios policiales que protegieran el Capitolio, dijo Cheney, sino que fue Pence quien lo hizo.
Caroline Edwards, la primera oficial de policía herida en el ataque, testificó que los manifestantes la llamaron «traidora» y «perra» antes de quedar inconsciente.
Ella describió que más tarde se encontró en medio del tumulto con el oficial Brian Sicknick «pálido como un fantasma», quien murió un día después del ataque después de sufrir dos derrames cerebrales.
«Estaba resbalando en la sangre de la gente», dijo el oficial Edwards a los legisladores. «Fue una carnicería. Fue un caos».
El documentalista británico, Nick Quested, que estaba rastreando a los Proud Boys, un grupo de extrema derecha, el día del ataque, también prestó declaración.
Describió su sorpresa por la ira y la violencia de los «insurrectos» desenfrenados.
El panel del Congreso que investiga el asalto del 6 de enero de 2021 contra el Capitolio de Estados Unidos llevará a cabo audiencias a lo largo de junio mostrando los detalles de lo que dice fue un complot generalizado dirigido por el expresidente Donald Trump para anular las elecciones presidenciales de 2020.
En las cinco próximas audiencias se centrarán en los grupos y las personas que, según se dice, estuvieron involucradas en la conspiración y la organización de los disturbios.
El testimonio también se centrará en las actividades de Trump antes y durante el ataque.
Se estima que 20 millones de personas sintonizaron las transmisiones de televisión estadounidenses en vivo de la audiencia del jueves de los legisladores que investigan los disturbios de 2021 en el Capitolio de Estados Unidos, dijo el viernes la agencia de calificación Nielsen.
Las cadenas de televisión ABC, CBS y NBC, interrumpieron la programación regular para mostrar el evento.
El ataque marcó la única vez en la historia de Estados Unidos que el poder no se pasó pacíficamente de un presidente a otro.
El expresidente Trump ha estado insinuando públicamente sobre otra candidatura a la Casa Blanca en 2024. El continúa haciendo afirmaciones sin fundamento de que las últimas elecciones fueron manipuladas por un fraude electoral masivo.
El ataque al Capitolio por parte de miles de personas, muchas de las cuales ondeaban banderas de Trump y vestían su atuendo característico «Make America Great Again», retrasó la certificación de las elecciones durante horas.
Se necesitaron cuatro horas para asegurar el edificio para que el Congreso pudiera certificar la victoria del presidente Joe Biden.
Cuatro personas murieron el día de los disturbios en el Capitolio de Estados Unidos.: una mujer desarmada baleada por la policía y las demás por causas naturales.
Más de 100 policías resultaron heridos. Otros cuatro oficiales murieron más tarde por suicidio.
Más de un año después, al menos 862 personas han sido detenidas y acusadas de delitos.
Solo 306 manifestantes acusados federalmente se han declarado culpables hasta el momento.
Los republicanos han descartado la investigación televisada como una estratagema para distraer a los estadounidenses de los obstáculos políticos que enfrentan los demócratas cuando faltan cinco meses para las elecciones de mitad de mandato en Estados Unidos.
Trump lo descartó como un «engaño político».
Donald Trump no solo se convirtió en el primer presidente en ser acusado dos veces, sino que la Cámara también lo acusa ahora de incitar a una insurrección el 6 de enero de 2021.
Las encuestas de opinión sugieren que los demócratas pueden perder el control de la Cámara e incluso potencialmente del Senado cuando la nación vote en noviembre.
Mientras los estadounidenses lidian con la inflación, incluyendo los precios de la gasolina, y una escasez de fórmula para bebés, el presidente estadounidense Joe Biden, un demócrata, ha visto caer su popularidad entre los votantes.
