Los abogados del Departamento de Justicia pidieron el lunes al juez que aprobó la orden de allanamiento del centro turístico Mar-a-Lago del expresidente Donald Trump que mantenga sellada la declaración jurada adjunta.
Los fiscales dijeron que la declaración jurada contiene «información altamente confidencial sobre los testigos, incluidos los testigos entrevistados por el gobierno» y otra «información que la ley exige que se mantenga sellada».
Los aliados republicanos de Trump en los últimos días han intensificado sus pedidos para que el fiscal general Merrick Garland abra el documento, lo que revelaría la evidencia que los fiscales mostraron para demostrar que tenían una causa probable para creer que se cometieron delitos en la casa de Trump.
Los fiscales federales respondieron a las consultas de numerosas organizaciones de noticias, para hacer pública la declaración jurada argumentando que debería permanecer sellada “para proteger la integridad de una investigación policial en curso que implica la seguridad nacional”.
También dijeron que la declaración jurada contiene “información altamente confidencial sobre testigos, incluidos testigos entrevistados por el gobierno; técnicas específicas de investigación; e información requerida por la ley para ser mantenida sellada.”
La solicitud del Departamento de Justicia se produce después de que un juez federal revelara el viernes la orden de allanamiento que los agentes del FBI utilizaron para incautar documentos de la residencia de Trump en Palm Beach, Florida, el 8 de agosto.
El viernes 12 de agosto, un tribunal federal en el sur de Florida reveló la orden de allanamiento y varios documentos legales adjuntos que mostraban que los agentes del FBI se llevaron 11 conjuntos de registros clasificados del resort Mar-a-Lago del ex presidente Donald Trump.
Hay tres niveles principales de clasificación para materiales gubernamentales confidenciales: alto secreto, secreto y confidencial.
«Alto secreto» es el nivel más alto, reservado para la información de seguridad nacional de Estados Unidos más reservada.
Los agentes del FBI recolectaron cuatro conjuntos de documentos de alto secreto, tres conjuntos de documentos secretos y tres conjuntos de documentos confidenciales, se reveló el viernes.
Algunos documentos se describieron como documentos «SCI», que significa «información compartimentada confidencial» altamente clasificada.
Dichos documentos generalmente se guardan en instalaciones gubernamentales especiales porque su divulgación podría dañar la seguridad nacional.
La orden emitida el viernes mostró que el Departamento de Justicia está investigando violaciones de tres leyes, incluida una disposición en la Ley de Espionaje que prohíbe la posesión de información de defensa nacional y otra ley que tipifica como delito destruir, ocultar o falsificar registros con conocimiento de causa con la intención de obstruir una investigación.
El viernes, Trump afirmó en un comunicado en su plataforma de redes sociales, sin pruebas, que tenía una orden permanente para desclasificar todos los materiales recuperados en su casa.
La búsqueda se llevó a cabo como parte de una investigación federal sobre si Trump eliminó ilegalmente documentos cuando dejó el cargo en enero de 2021 después de perder las elecciones presidenciales.
La investigación sobre la eliminación de registros por parte de Trump comenzó este año después de que la Administración Nacional de Archivos y Registros, la agencia encargada de salvaguardar los registros presidenciales que pertenecen al público, hiciera una remisión al Departamento de Justicia.
Cuando el fiscal general Merrick Garland anunció el jueves que el departamento de Justicia había pedido al juez Reinhart que revelara la orden, Trump dijo que el allanamiento fue una retribución política y sugirió, sin evidencia, que el FBI pudo haber colocado evidencia en su contra.
Los fiscales dijeron el lunes en su presentación que el gobierno no se opuso a revelar otros materiales presentados en relación con la orden de allanamiento, documentos que, según dijeron, no pondrían en peligro la integridad de la investigación.
Pero dijeron que revelar la declaración jurada «comprometería» su investigación.
Muchos de los aliados de Trump han defendido al expresidente en medio de las consecuencias de la búsqueda de Mar-a-Lago por parte del FBI y están pidiendo que se haga pública la declaración jurada.
Las autoridades estadounidenses advirtieron el lunes sobre un aumento de las amenazas violentas a las fuerzas del orden tras el allanamiento de la propiedad de Donald Trump en Florida, Mar-a-Lago.
El FBI y el Departamento de Seguridad Nacional emitieron un memorando para las fuerzas del orden de todo el país.
Dijo que había habido un «aumento en las amenazas violentas publicadas en las redes sociales contra funcionarios federales».
El jueves un hombre armado que intentó entrar a una oficina del FBI en Cincinnati, Ohio, la policía lo mató a tiros después de una persecución en automóvil.
Al ser identificado por algunos medios de comunicación, se determinó que puede haber tenido puntos de vista de extrema derecha.
Los fiscales citaron el lunes la violencia reciente y las crecientes amenazas contra el FBI como otra razón para no publicar la declaración jurada.
En cartas enviadas el lunes al Fiscal General Merrick Garland, al Director del FBI Christopher Wray y al Jefe de Gabinete de la Casa Blanca, Ron Klain, varios republicanos en el Comité Judicial de la Cámara de Representantes exigieron copias de documentos y comunicaciones relacionadas con la ejecución de la orden de allanamiento antes del 29 de agosto.
El allanamiento del FBI el lunes pasado no tiene precedentes, pues es la primera vez que se registra la casa de un expresidente en una investigación criminal.
Trump no ha sido acusado de ningún delito. No está claro si se presentarían cargos.
