Israel y Hamas anunciaron un alto el fuego el jueves poniendo fin a una guerra de 11 días que causó destrucción y muerte en Gaza y paralizó gran parte de Israel.

La oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu dijo que Israel aceptó la propuesta egipcia después de una reunión de su gabinete de seguridad. 

Hamas rápidamente hizo lo mismo y dijo que honraría el trato.

La agencia de noticias estatal MENA de Egipto dijo que la tregua entraría en vigor a las 2 am (9 am AEST), aproximadamente tres horas después del anuncio.

Los combates comenzaron el 10 de mayo, cuando los militantes de Hamas en Gaza dispararon cohetes de largo alcance hacia Jerusalén después de días de enfrentamientos entre manifestantes palestinos y la policía israelí en el complejo de la mezquita de Al-Aqsa.

La mezquita es un lugar de conflicto que los musulmanes conocen como el Santuario Noble y Judíos como el Monte del Templo.

Al menos 230 palestinos murieron, incluidos 65 niños y 39 mujeres, con 1.710 personas heridas, según el Ministerio de Salud de Gaza, que no desglosa las cifras en combatientes y civiles.

Hamas y el grupo militante Jihad Islámica dijeron que al menos 20 de sus combatientes murieron, mientras que Israel dijo que el número era de al menos 130.

Unos 58.000 palestinos han huido de sus hogares, muchos de ellos buscando refugio en escuelas abarrotadas de la ONU en un momento de un brote de coronavirus.

También murieron doce personas en Israel, incluido un niño de cinco años, una niña de 16 y un soldado.

Los suministros médicos, el agua y el combustible para la electricidad se están agotando en el territorio palestino, en el que Israel y Egipto impusieron un bloqueo después de que Hamas tomó el poder en 2007.

Israel considera que Hamas, un grupo militante islámico que busca su destrucción, es un grupo terrorista y el gobierno de Hamas no está reconocido internacionalmente.