El 24 de junio, la Corte Suprema de los Estados Unidos, en una decisión de 6-3, revocó el histórico fallo Roe v. Wade de 1973 que reconoció el derecho constitucional de la mujer al aborto y lo legalizó en todo el país. 

La corte, en un fallo impulsado por su mayoría conservadora, tuvo una votación de 5 a 4 para anular a Roe v. Wade. Cinco jueces estaban firmemente a favor: Samuel Alito, Clarence Thomas, Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett.

La corte confirmó una ley de Mississippi respaldada por los republicanos que prohíbe el aborto después de las 15 semanas de embarazo.

Mississippi se encuentra entre los 13 estados con las llamadas leyes de activación para prohibir el aborto, una vez Roe v. Wade sea anulada.

22 estados están preparados para prohibir el procedimiento bajo las leyes existentes o las enmiendas constitucionales que restringen fuertemente el acceso. Algunas prohibiciones entrarán en vigencia de inmediato y otras en las próximas semanas y meses.

Aún así, hay 16 estados que protegen el acceso al aborto bajo la ley estatal, ya sea garantizando el derecho a abortar hasta cierto punto del embarazo o, en solo cuatro estados y Washington, DC, protegiendo el derecho en cualquier etapa del embarazo.

En el histórico caso Roe v Wade de 1973, la Corte Suprema dictaminó por una votación de siete a dos que el derecho de una mujer a interrumpir su embarazo estaba protegido por la constitución de los Estados Unidos.

El fallo otorgó a las mujeres estadounidenses el derecho absoluto a abortar en los primeros tres meses del embarazo, pero permitió restricciones en el segundo trimestre y prohibiciones en el tercero.

Las mujeres con embarazos no deseados en gran parte de Estados Unidos ahora pueden enfrentar la opción de viajar a otro estado donde el procedimiento sigue siendo legal y está disponible, comprar píldoras abortivas en línea o someterse a un aborto ilegal potencialmente peligroso.

El presidente Joe Biden condenó el fallo por tomar un «camino extremo y peligroso».

“Es un día triste para la corte y para el país”, dijo Biden en la Casa Blanca.

Empoderar a los estados para prohibir el aborto convierte a Estados Unidos en un caso atípico entre las naciones desarrolladas en la protección de los derechos reproductivos, agregó el presidente demócrata.

Biden dijo que su administración protegerá el acceso de las mujeres a los medicamentos aprobados por la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos, incluidas las píldoras anticonceptivas y el aborto con medicamentos, al tiempo que combatirá los esfuerzos para restringir que las mujeres viajen a otros estados para abortar.

Después del fallo de la Corte Suprema, se espera que se corte el acceso al aborto a unas 36 millones de mujeres en edad reproductiva, según una investigación de Planned Parenthood, una organización de atención médica que brinda servicios de aborto.

Gran Bretaña, Francia y algunas otras naciones calificaron el fallo como un paso atrás, aunque el Vaticano lo elogió y dijo que desafiaba al mundo a reflexionar sobre temas de la vida, pero también pidió cambios sociales para ayudar a las mujeres a mantener a sus hijos.

Corporaciones estadounidenses como  Disney, Facebook, Johnson & Johnson, JPMorgan Chase & Co, entre otras, anunciaron el viernes que cubrirán los gastos de sus empleadas si tienen que viajar para recibir servicios de aborto.

La medida cambiará drásticamente la vida de millones de mujeres en Estados Unidos y exacerbará las crecientes tensiones en un país profundamente polarizado.

Los fallos sobre el aborto y las armas ilustran la polarización en Estados Unidos en una variedad de temas, que también incluyen la raza y los derechos de voto.