El multimillonario texano Ross Perot, quien en la década de 1990 se postuló dos veces para presidente de Estados Unidos contra candidatos de los dos partidos principales, murió a la edad de 89 años.

Le diagnosticaron leucemia a principios de este año.

Descrito como idiosincrásico y luchador, fue pionero en la industria de los datos informáticos al fundar su propia empresa en 1962.

Pero era mejor conocido por participar en la campaña de 1992, abogando por presupuestos equilibrados y pidiendo el fin de la subcontratación de empleos en el extranjero.

Perot tomó casi una quinta parte del voto popular en una carrera de tres vías.

Eso lo convirtió en uno de los candidatos independientes más exitosos en la historia de los Estados Unidos, y se cree que ayudó al demócrata Bill Clinton a derrotar al titular George HW Bush.

Perot se postuló nuevamente a la presidencia en 1996, después de formar el Partido de la Reforma.

No participó en los debates presidenciales, los organizadores dijeron que carecía del apoyo suficiente y sólo obtuvo el 8% de los votos.

El Partido de la Reforma comenzó a desmoronarse.

Pero muchos de los temas ideológicos que expuso: gobierno pequeño, anti comercio y antiglobalismo, serían luego adoptados por Donald Trump.

Ross Perot siempre decía que había vivido el sueño americano.