Un terremoto sacudió el sur de California el jueves, el más poderoso en 25 años. Provocó incendios, dañó edificios, pero sólo causó heridas leves.
El sismo de magnitud 6.4, golpeó aproximadamente 182 km al noreste de Los Ángeles, cerca de la ciudad de Ridgecrest, alrededor de las 10:30 am PDT (1730 GMT), según el Servicio Geológico de Estados Unidos.
El epicentro estaba en el borde del Parque Nacional Death Valley.
El gobernador de California, Gavin Newsom, aprobó una proclamación de emergencia, y la alcaldesa de Ridgecrest, Peggy Breeden, dijo que había declarado el estado de emergencia, un paso que permite a la ciudad recibir ayuda de agencias externas.
El terremoto es el más grande en el sur de California desde el terremoto de Northridge de magnitud 6.6 de Northridge en 1994, dijo el geofísico Paul Caruso del USGS.
Ese terremoto, que se centró en un área densamente poblada de Los Ángeles, mató a 57 personas y causó daños por miles de millones de dólares.
La sismóloga de USGS, Lucy Jones, dijo que más de 80 réplicas habían golpeado el área en las horas desde el terremoto inicial.
