La agencia espacial estadounidense confirmó el jueves que su rover Perseverance aterrizó con éxito en el cráter Jezero de Marte.

El vehículo de seis ruedas ahora pasará al menos los próximos dos años perforando las rocas, buscando evidencia de vidas pasadas.

Se cree que Jezero tuvo un lago gigante hace miles de millones de años. Y donde ha habido agua, existe la posibilidad de que también haya habido vida.

Los ingenieros de la misión de control de la NASA en California estallaron de alegría cuando llegó la confirmación del aterrizaje.

En el pasado podrían haberse abrazado y chocado los cinco, pero los estrictos protocolos de coronavirus significaban que todos habían sido separados por pantallas. Un golpe de puño respetuoso fue todo lo que pudieron hacer.

No obstante, la emoción fue evidente. Y el aplauso continuó cuando llegaron las dos primeras imágenes. Fueron tomadas por cámaras de ingeniería de baja resolución. Había polvo cubriendo las cubiertas de lentes translúcidas que aún estaban unidas, pero era posible ver una superficie plana tanto delante como detrás del rover.

El análisis posterior al aterrizaje indicó que el vehículo había bajado unos 2 km al sureste del delta en Jezero que Perseverance planea investigar.

Aterrizar en Marte nunca es fácil, y aunque la NASA se ha convertido en un experto en eso, todos en el equipo de Perseverance habían hablado con mucha cautela antes del jueves.

Este es el segundo rover de una tonelada enviado a Marte por la agencia espacial estadounidense.

El primero, Curiosity, aterrizó en un cráter diferente en 2012. Probó tecnologías de descenso innovadoras, incluida una cuna impulsada por cohetes, que Perseverance ahora también ha puesto en práctica.

Jezero es la primera parada en una búsqueda de rastros de vida microbiana antigua en el Planeta Rojo.

El nuevo explorador en Marte de la NASA es el laboratorio de astrobiología más avanzado jamás enviado a otro mundo.

Los científicos de la NASA han descrito a Perseverance como la más ambiciosa de las casi 20 misiones estadounidenses a Marte que se remontan al vuelo de la nave espacial Mariner en 1965.