Israel emitió una orden de evacuación para los residentes del norte de Gaza, instándolos a trasladarse al sur en preparación para una esperada ofensiva terrestre.
Sin embargo, la orden ha encontrado dificultades y oposición.
La Media Luna Roja Palestina en la ciudad de Gaza afirmó que sería imposible trasladar de manera segura a un millón de personas en 24 horas, considerando la presencia de heridos, ancianos y niños en los hospitales.
Los médicos también se niegan a evacuar los hospitales y abandonar a los pacientes.
Un funcionario de Hamás ha desestimado la orden de evacuación calificándola de «propaganda falsa» y ha instado a los ciudadanos a ignorarla, mientras que un político egipcio afirma que Israel está intentando obligar a los palestinos a trasladarse a Egipto.
La comunidad internacional, incluidas las Naciones Unidas, ha pedido que se rescinda la orden, advirtiendo de consecuencias humanitarias devastadoras.
Varios países, como Estados Unidos, Argentina, Francia, Corea del Sur y Canadá, han estado evacuando a sus ciudadanos de Israel.
La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios ha emitido un llamamiento de emergencia para solicitar 294 millones de dólares en financiación para abordar las necesidades urgentes de los palestinos.
La Organización Mundial de la Salud ha subrayado que es imposible trasladar a pacientes gravemente enfermos desde el norte de Gaza.
La orden de Israel ha generado preocupaciones sobre la seguridad y el bienestar de la población civil en Gaza.
Israel expresó su «profunda decepción» por la falta de condena por parte de China del ataque de Hamas. Mientras tanto, el secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken, se reunió con el rey Abdullah de Jordania y el presidente palestino Mahmoud Abbas en Ammán.
Después de las oraciones del viernes se formó una gran manifestación en apoyo del pueblo de Gaza, en la que los manifestantes compartieron videos en las redes sociales de soldados jordanos usando gases lacrimógenos para hacer retroceder sus manifestaciones cerca de la frontera de Jordania con la Cisjordania ocupada.
El cruce Allenby o Rey Hussein, controlado por Israel en el lado palestino, fue cerrado. Muchos jordanos son refugiados palestinos o tienen raíces palestinas, incluida la reina Rania.
Se esperan protestas en todo el mundo árabe después de las oraciones del viernes, con miles de iraquíes reunidos en Bagdad en apoyo a los palestinos en Gaza.
El secretario general del organismo panárabe acusó a Israel de llevar a cabo «un atroz acto de venganza… castigando a civiles indefensos en Gaza» en lugar de una «operación militar planificada o estudiada» contra los combatientes de Hamas.
Decenas de miles de manifestantes están saliendo a las calles en todo Medio Oriente y más allá en apoyo a los palestinos y para protestar por los ataques aéreos israelíes.
Desde Jordania hasta Yemen, la gente salió a las calles después de las oraciones del viernes. Se han registrado protestas en Irak, Irán, Jordania, Venezuela, Japón y Australia.
El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, dice que «Estados Unidos se asegurará de que Israel tenga lo que necesita para defenderse», mientras las fuerzas israelíes se preparan para nuevos ataques contra Gaza.
Dijo que estaban llegando a Israel municiones, capacidades de defensa aérea y otros equipos y recursos.
El máximo diplomático de la Unión Europea, Josep Borrell, ha dicho que el llamamiento de Israel para que más de un millón de palestinos se reubiquen en el sur del enclave en 24 horas era «poco realista».
La situación entre Israel y Palestina sigue siendo tensa y ambas partes sufren pérdidas devastadoras. Sin embargo, todavía se están haciendo esfuerzos para gestionar la situación y garantizar la seguridad de ambos lados.
Organizaciones internacionales, como la ONU y Alemania, están en conversaciones para establecer espacios seguros para los residentes de Gaza tras la orden de evacuación de Israel.
La Media Luna Roja Palestina también ha decidido no evacuar hacia el sur a pesar de las amenazas del ejército israelí de bombardearla, afirmando que continuarán con sus deberes humanitarios y no dejarán que la gente se enfrente a la muerte sola.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, han discutido el establecimiento de áreas seguras en Gaza donde los civiles podrían reubicarse, y el ministro de Asuntos Exteriores de Alemania también está en conversaciones con la ONU y Egipto sobre este asunto.
Es importante recordar que detrás de los titulares y la retórica política, hay personas reales que sufren en ambos lados del conflicto.
La situación es compleja y no hay soluciones fáciles, pero es crucial que todas las partes involucradas sigan trabajando para lograr una resolución pacífica que dé prioridad a la seguridad y el bienestar de los civiles.
